Ser un profesional “freelance” o de libre ejercicio después de graduarte, es una opción de empleo que está ganando cada vez más prominencia en nuestros días; especialmente entre los egresados en Arte y Diseño. Quizás suene fácil, pero no lo es; ya que todo comienzo requiere de esfuerzo y tesón. Con la intención de prepararte para el mundo laboral, puedes empezar por seguir los pasos y consejos que a continuación te ofrecemos; incluso si aún estás estudiando:
1. Crea tu propio portafolio
No sólo te será útil si planeas convertirte en trabajador freelance, ya que todo estudiante debe contar con una muestra de sus trabajos si desea ingresar en el futuro en alguna corporación o compañía de diseño. Incluye una colección de todas las creaciones artísticas y proyectos que has desarrollado a lo largo de tus estudios. Recuerda lo siguiente:
– Calidad es mejor que cantidad: Considera tus mejores trabajos. Después de todo, tus clientes o empleadores mostrarán mayor interés en tus obras maestras que en la cantidad de hojas insertadas.
– Añade vida a tus creaciones: Es recomendable incorporar un escrito corto (de entre 2 y 4 oraciones) que explique tu trabajo/proyecto, de tal manera que cuando revisen el portafolio puedan hacerse una idea de por qué hiciste lo que hiciste. Por ejemplo: el concepto, de donde surgió la idea, qué te inspiró, etc. NOTA: NO se trata de un ensayo. Debe ser corto, conciso y simple.
– Variedad: Tendrás la sartén por el mango si incluyes trabajos comerciales dentro de tu portafolio, y no sólo tus tareas y asignaciones universitarias. Aunque pienses que la calidad de los mismos no sea tan alta, tienen un gran valor; sobre todo para los empleadores/clientes quienes se darán cuenta de que tienes experiencia. Les dará seguridad en tus habilidades, y pagarán por ellas. Si aún no has hecho ningún trabajo comercial, no entres en pánico; pero procura poner manos a la obra lo antes posible.
– Mantente actualizado: Asegúrate de incluir tus trabajos más recientes dentro de la muestra. Es bueno saber que has puesto en práctica todas tus destrezas adquiridas académicamente, y que eres capaz de estar al día con la industria del arte y el diseño.
2. Prepárate para lo que está por venir
La vida de un trabajador de libre ejercicio no es muy diferente a la que te imaginas, porque ningún elemento es impredecible. Sin embargo, debes estar listo:
- Construye tu presencia en Internet:
Publica tus creaciones artísticas y/o proyectos en redes sociales como Flickr, Tumblr, Pinterest, Instagram, etc.
- Ten expectativas positivas: Como en cualquier otro empleo, ser freelance también tiene sus retos. Una de las ventajas es la libertad de tiempo, ya que no debes ajustarte a un horario de 9 de la mañana a 5 de la tarde todos los días; y puedes organizar tu esquema laboral y fijar citas a tu antojo y conveniencia. Sin embargo, la desventaja es la inconsistencia de trabajo; ya que no hay manera de saber cuándo tendrás proyectos y cuando no. De todos modos, mantente siempre alerta ante posibles oportunidades, y construye una red con tus amigos, colegas y actuales/potenciales clientes.
Fuente: hotcourseslatinoamerica.com
